REGIÓN INSULAR

PUERTO AYORA



Hacia el lado occidental de Puerto Ayora está el sendero interpretativo conformado por dependencias del Parque Nacional Galápagos y la Fundación Charles Darwin. Aquí queda el centro de crianza Fausto Llerena que en sus instalaciones alberga el trabajo de investigadores que buscan reproducir y criar en cautiverio a las tortugas gigantes que enfrentan peligro de extinción en sus hábitats de origen.
El recorrido por estos puntos interpretativos inicia en el centro de visitantes Van Straelen, aquí se busca informar al turista respecto a las condiciones ambientales de las islas, su historia, amenazas y los esfuerzos de conservación para mantener este Patrimonio Natural de la Humanidad. Este recorrido es la mejor manera de empezar la visita a la isla de Santa Cruz.
El centro de crianza incuba huevos de tortugas gigantes provenientes de las islas Santa Cruz, Santiago, Española, Pinzón y Pinta. Una vez que las tortugas eclosionan de los huevos son mantenidas hasta que alcanzan el tamaño para sobrevivir en estado silvestre. Así, el Parque Nacional busca restablecer las poblaciones de estos reptiles endémicos en las zonas de las que fueron saqueados por piratas y bucaneros.
Aquí también se llevan a cabo programas para el rescate de las poblaciones de iguanas terrestres de Santa Cruz, Isabela y Seymour Norte que en el pasado fueron diezmadas por los perros introducidos en las islas. El recorrido en este sendero interpretativo tiene un valor pedagógico importante ayudado por el entorno de los bosques de cactus y matorrales donde abundan los pinzones de Darwin.

ISLA SAN CRISTÓBAL


San Cristóbal es la isla más oriental del archipiélago de Galápagos y la más antigua también. En su costa occidental está Puerto Baquerizo Moreno, el mayor poblado de la isla y capital de la provincia. San Cristóbal también es conocida porque sus playas están pobladas densamente por el lobo marino de Galápagos en lugares como La Lobería.
Al igual que las otras islas grandes San Cristóbal tiene zonas elevadas, su mayor altitud es de 650 metros en el cerro de El Junco. En el cráter de este antiguo volcán está la única laguna de agua dulce en Galápagos. Las zonas altas de esta isla también han sido parte de la historia productiva del archipiélago y en la zona de El Progreso quedan restos de lo que fue un ingenio azucarero.
En Puerto Baquerizo Moreno está el centro de interpretación que explica la historia natural de las islas y enfatiza en la necesidad de mejores actitudes de parte de gente para preservar el patrimonio natural de Galápagos. Desde el centro de interpretación parten senderos que conducen a playas y acantilados con paisajes típicamente galapagueños.
Las playas de San Cristóbal también presentan escenarios de particular belleza, como Puerto Chino, una pequeña ensenada de aguas turquesa donde las arenas blancas del fondo marino se ensombrecen con el paso de tortugas marinas, manta rayas y tiburones. Muy cerca de esta playa está la galapaguera de Cerro Colorado, un proyecto de rescate y repoblación de las tortugas gigantes de esta isla.

PLAYAS PARADISÍACAS
  EN BAHÍA TORTUGA


Bahía Tortuga es una playa de arenas blancas y aguas turquesa, quizás entre las más hermosas de las islas Galápagos y recibe la masiva visita de tortugas marinas en época de anidación. Está ubicada en la zona sur de la isla de Santa Cruz y se llega luego de una caminata de cuarenta y cinco minutos por un sendero entre bosques de cactus de tunas.
Existen dos playas en el sector. Playa Brava que es la más amplia y mide dos kilómetros de extensión; sus aguas son ideales para el surf y es uno de los destinos internacionales para este deporte. Por otro lado, Playa Mansa asemeja una gran piscina rodeada de manglar y arena blanca, en esta se practica kayak, buceo y snorquel.
Entre las dos playas existe un bosque de tunas, u Opuntias por el nombre científico de este cactus, que se recorre por un sendero rodeado de longevos tunos de más de cinco metros de altura y cuyos troncos apenas pueden abrazarse por una persona. En este trayecto las iguanas marinas tienen su zona de anidación y las recién nacidas se asolean sin incomodarse por los visitantes.
Este lugar cuenta con una gran diversidad de aves marinas, es frecuente que la caminata por la playa esté acompañada por ostreros, playeros, y la gaviota de Galápagos. El paisaje junto a las playas es muy pintoresco y la vegetación de las zonas arenosas le brinda un aspecto particular. Bahía Tortuga es también el lugar donde se realizan actividades de educación ambiental y conciencia respecto a la naturaleza por la población de Puerto Ayora.

 ISLAS GALÁPAGOS


Las islas Galápagos están a 972 kilómetros al oeste de las costas del Ecuador continental y forman un archipiélago volcánico que comprende 13 islas de gran tamaño, cinco islas medianas, 215 islotes y varias rocas.
El archipiélago está ubicado en la zona ecuatorial, donde convergen las corrientes marinas fría de Humboldt, cálida de Panamá y la submarina de Cromwell. La posición de las islas y el aporte de las corrientes marinas otorgan a Galápagos una riqueza biológica única y una abundancia inusual de recursos naturales.
El origen volcánico de las islas sigue evidente en las recientes erupciones de las islas Isabela y Fernandina en el extremo occidental de Galápagos. Su historia geológica promovió que las islas sean un laboratorio viviente donde evolucionaron especies de fauna únicas en el mundo como iguanas marinas, tortugas gigantes y los pinzones que forzaron a los ojos de Charles Darwin a entender las fuerzas de la vida de una manera distinta.
La belleza escénica de las islas incluye paisajes áridos muy calurosos, playas arenosas, acantilados, manglares, bosques secos, y cumbres volcánicas cubiertas por garúa a los 1700 metros. La riqueza de las islas llevó a que este territorio sea reconocido como el primer parque nacional de Ecuador en 1959 y patrimonio natural de la humanidad por la UNESCO desde 1979.
De la misma manera, sus mares, arrecifes y canales son hogar de una riqueza marina asombrosa y recursos estéticos indescriptibles. Las aguas que rodean Galápagos fueron declaradas reserva marina en 1998 y constituyen la segunda zona marina protegida más grande del mundo.

RESERVA MARINA


El mar que rodea a las islas Galápagos está alimentado por corrientes superficiales y profundas que brindan a estos ecosistemas una riqueza particular con animales que provienen de los cuatro puntos cardinales. Las aguas del archipiélago brindan condiciones para la reproducción prolífica de la vida marina residente y migratoria.
La reserva marina de Galápagos protege 133 000 kilómetros cuadrados de aguas que rodean un contorno de 40 millas alrededor de las islas. Fue declarada en 1998 como la primera reserva marina en Ecuador y por su tamaño es la segunda mayor en el mundo, solo por detrás de la Gran Barrera de Coral. Ambos lugares guardan la mayor riqueza de vida marina conocida.
En los mares de Galápagos nadan miles de especies de peces invertebrados marinos, algunas todavía poco conocidas y en espera por científicos que se sumergen para descubrirlas. Aproximadamente el 25% de esta vida es exclusiva de Galápagos. La reserva marina también es lugar de congregación para 24 especies de mamíferos marinos, entre ellos dos especies endémicas: el lobo marino de Galápagos y el lobo peletero de Galápagos, así como ballenas jorobadas, orcas y delfines. Esto le ha valido también la declaratoria como santuario de ballenas desde 1990.
La reserva marina de Galápagos invita al buceo y snorquel como deportes de aventura para vivir la experiencia submarina junto a manta rayas inofensivas, tortugas marinas nadando fácilmente, lobos marinos que asemejan torpedos, peces multicolores que curiosean a los turistas y en el norte del archipiélago el gigantesco tiburón ballena.

 ISLOTE TINTORERAS


El perfil costero de la parte sur Isabela está repleto de islotes y canales. Al sur de la bahía de Puerto Villamil está el islote Tintoreras. Hasta allá se llega en un bote a motor en un recorrido que toma diez minutos, sin embargo el viaje demora para los turistas porque en el trayecto las rocas se llenan de aves marinas como el pingüino de Galápagos, piqueros de patas azules e iguanas marinas que regresan después de alimentarse.
Este islote está formado por lava volcánica del tipo "a´a´" que se cubre de líquenes blancos. El canal que da nombre al islote se llena de agua marina durante la marea alta, hasta este llegan docenas de tiburones tintorera (Triaenodon obesos) para dormir durante el día y salen en la noche en busca de alimento. Desde el mirador se ve a los tiburones descansando unos junto a los otros.
Los senderos del islote recorren playas pobladas por cientos de iguanas y advierten los lugares para que los transeúntes no incursionen las zonas de anidamiento de estos reptiles endémicos del archipiélago. El recorrido se interna en playas con manglar donde las hembras del Lobo Marino de Galápagos se congregan en el cuidado de sus crías.
La visita a Tintoreras generalmente termina en el mar, las zonas aledañas al islote son lugares ideales para la práctica del snorquel y buceo. Entre las rocas negras manchadas por el naranja de las cayapas, las aguas tibias reciben a turistas que nadan junto al lobo marino de Galápagos, tortugas carey, peces coloridos sobre u fondo poblado por algas y erizos.


VIDA SUBMARINA EN LOS TÚNELES


Desde Puerto Villamil se toma una lancha en dirección al occidente, durante la navegación por un mar agitado y poco profundo se ven manta rayas gigantes y los caparazones de las tortugas marinas cuando salen a respirar. Después de una hora bajo vigilancia de piqueros de Nazca y patas azules se llega a los túneles, un laberinto de galerías de lava entre el mar.
El paisaje terrestre de los túneles está dominado por arcos y rocas sobre el mar, de ellos brotan cactus y arbustos bien adaptados a condiciones de sequía y salinidad. Para llegar a la parte interna de los túneles hay que dejarse llevar suavemente por la marea. Puentes de roca recorrerla parte terrestre de los túneles y desde ahí se observa el fondo del mar plagado de peces a través del agua turquesa.
Los túneles y su riqueza natural hacen uno de los mejores destinos para snorquel en todo el archipiélago. Quienes experimentan esta aventura dicen que es como estar dentro de un acuario. Bajo el mar la vista empieza a alucinar con los colores de las damiselas, peces zapatilla, y aunque es un poco más raro se pueden ver rayas águila y la majestuosa presencia de tiburones tintorera.
La visita a Los Túneles puede tomar cuatro horas, pero si las emociones frente a la vida marina se multiplican, el retorno hacia Puerto Villamil se hará hacia el final de la tarde. La posibilidad de visitar detenidamente un atractivo como este es una de las razones para contratar un tour de diario en su visita a Isabela.


 





No hay comentarios:

Publicar un comentario